¿Cuándo las frutas y verduras ecológicas lo son realmente?

cuándo la fruta y verdura ecológica lo es realmente

¿Cuándo las frutas y verduras ecológicas lo son realmente?

En la actualidad el estilo de vida ecofriendly y los hábitos saludables son una práctica cada vez más frecuente en la población. Hemos pasado de la rapidez y comodidad que aportan los productos elaborados a preocuparnos más por las etiquetas y el contenido de lo que comemos. Pero, ¿sabemos cuándo las frutas y verduras ecológicas lo son realmente?

Ecológico, bio, orgánico… estos son los añadidos que llevan los productos que normalmente compramos como respetuosos con el ambiente y sin añadidos químicos.

¿Cuándo un alimento es ecológico?

Para acabar con este dilema desde 1991 la Unión Europea regula la producción ecológica en el Reglamento 834/2007 sobre la producción y etiquetado de productos ecológicos. Las reglas que se fijan en esta ley establecen los siguientes puntos:

  • La producción debe asegurar un proceso que no dañe el medio ambiente ni la salud de los seres vivos.
  • Se prioriza la utilización de recursos naturales
  • Se limita el empleo de recursos artificiales como medicamentos, fertilizantes o fisiosanitarios.
  • Si hay una alternativa natural, se debe usar esta. Esto es, si para luchar con problemas como las plagas hay opciones naturales se deben usar estas en vez de recursos artificiales.
  • El reglamento incluye un listado de sustancias que si pueden usarse en la agricultura ecológica. Son compuestos de origen vegetal, animal y mineral. Si su calidad no es suficiente para lo que se necesite se autorizarán sustancias sintéticas. Este es el listado.

Es importante conocer el origen del producto que se compra, y si aparece con el añadido ecológico, buscar en su etiquetado el certificado que garantice este tipo de producción. También debemos conocer las palabras trampa, es decir, aquellas que se usan con el fin de hacerte creer que el producto que compras es un alimento ecológico, sin serlo. Algunas de estas palabras son: Casero, natural, tradicional, artesano…

Un truco rápido para identificar si algo puede ser ecológico, es su aspecto. La fruta y verdura ecológica presenta un aspecto menos atractivo a la vista, ya que no lleva componentes químicos ni se trata con productos para que su aspecto sea grande y bonito.